¿Te interesa participar en esta propuesta formativa y quieres saber cuanto vale? Tengo una sorpresa para ti...
La explicación sencilla y breve es que he decidido ofrecer mis formaciones bajo el paradigma de la Economía Solidaria, lo cual quiere decir que tu decides la aportación que quieres hacer. Entiendo que esto puede ser extraño y te genere confusión o incluso incomodidad. Mi intención no es confundirte o asustarte, al contrario, quiero que este trabajo pueda llegar a todas las personas que sinceramente quieren desarrollar nuevas herramientas para su vida y para el mundo que compartimos. A la vez, creo que re plantearnos como utilizamos el dinero es parte de este cambio de paradigma hacia unas relaciones más sanas y humanas. Por esta razón te invito a invertir un poco de tu tiempo en leer esta pagina que espero te ayudará a decidir tu aportación.
Las relaciones son nuestra riqueza más grande. Nuestras relaciones son un regalo. Un intercambio, no siempre simétrico, donde se satisfacen necesidades y se construyen recursos. Quiero que el trabajo que ofrezco sea un medio a través del cual construir relaciones dentro de un nuevo paradigma basado en la transparencia, la intimidad, el cuidado y la libertad. Para que esto ocurra me parece importante incluir el dinero en este marco de referencia. Lo normal sería poner un precio para la formación y las personas que pueden pagarlo acceden y a partir de ahí nos olvidamos del tema. A la vez, el dinero es un detonante muy grande para emociones, creencias y patrones, por esto me parece interesante incluirlo en el trabajo que haremos juntxs . Te invito a participar conmigo en este experimento, y compartir el proceso de manejar el dinero de otra forma.
¿De qué sirve el dinero? El dinero se ha establecido como un intermediario entre nosotrxs, la cercanía de la comunidad se ha sustituido por las metrópolis impersonales donde las interacciones están basadas en la utilidad, la eficiencia y la separación. Me gustaría llevar a cabo un experimento en como podemos crear maneras de recuperar nuestras relaciones, el sentimiento de compromiso, de cuidado, de entrega, de dialogo. ¿Cómo podemos incluir el dinero en este proceso? El dinero es un atajo para lo que queremos aportar a la vida de aquellas personas con las que generamos relaciones de apoyo mutuo. Si el atajo se hace muy grande, la relación se pierde y solo queda un intercambio utilitario. La fuerza de la relación es lo que hace que el dinero sea lo que se supone que es: un símbolo de valoración, agradecimiento, ganas de compartir y de aportar. Cuando nos conocemos, cuando hay confianza, cuidado y honestidad, podemos utilizar el dinero de una manera que refleje la realidad de nuestra relación. Ahora mismo no nos conocemos.
Transparencia Me gustaría que supieras algo de mi, para que esto te oriente. Desde años he decidido simplificar mi vida: vivo en el campo, compartiendo con otras personas, para mantener un estilo de vida cercano a la naturaleza, un entorno tranquilo, solidario, sostenible. Mis gastos son mínimos por lo que concierne lo básico: el alquiler, la comida, los suministros. Me gusta encontrar mi ropa en las tiendas de segunda mano, comer sencillo, reciclar objetos para darle nuevos usos, intercambiar. En mi tiempo libre me gusta hacer cosas sencillas como pasear en la naturaleza, acampar, sentarme alrededor de un fuego con amigxs. También hay aspectos de mi vida que requieren inversiones más grandes: sostener a mis hijxs que viven en el extranjero en sus procesos de estudio y emancipación. Cuidar de mi salud a través de medicinas holísticas y respetuosas. Seguir formándome, leyendo, recibiendo tutorías y acompañamiento para mis procesos para desarrollarme como persona y profesional. También contribuyo a los impuestos marcados por el gobierno y necesito atender a las reparaciones y gastos de los objetos que necesito para realizar mi trabajo. Mi trabajo tiene una naturaleza fluctuante, no tengo seguridad de los ingresos que voy a tener más allá de las formaciones y sesiones de acompañamiento que ofrezco. Los meses de verano, por lo general, todo para y los ingresos disminuyen bastante. Cuando estoy enferma y no trabajo, no recibo ningún tipo de compensación. Me he sentado para hacer unos cálculos aproximativos de lo que necesito recibir para poder sostener todo esto y he llegado a la cifra de 2400€ al mes por 10 meses del año, para que esto se distribuya en los meses en los que no hay mucho trabajo. Podría hacer con menos, entonces probablemente sacrificaría aquellos gastos que tienen que ver con mi desarrollo profesional y personal.
Compromiso Lo que valoro mucho entre nosotrxs es el compromiso, la fortaleza de nuestro acuerdo. Para proponer una formación necesito invertir tiempo, energía y recursos, cuando me comprometo con una formación estos recursos ya no los tengo para invertirlos en otras cosas. Por esto te pido considerar con atención si tienes el tiempo para comprometerte a asistir a toda la formación, a respetar los plazos y los horarios. Una vez empezada, si tu faltas o lo dejas, se queda una plaza que no se va a cubrir. Por esto es importante para mi que haya comunicación con respecto a retrasos, ausencias y que tu aportación no dependa de si puedes atender a todas las sesiones si no de ser consciente que la formación existe porqué tu estás participando en ella, en su totalidad.
¿Cómo lo hacemos? Te invito a considerar una suma de dinero que te gustaría aportar para la formación que quieres hacer. Tómate el tiempo para observar los pensamientos y emociones que te guían en este proceso. Recuerda que lo que te propongo es ofrecer desde el corazón, consciente de que estás aportando a mi sostenibilidad económica y a la vez cuidando de la tuya. ¿Dónde está el equilibrio? Te invito a descubrirlo por ti mismx y siempre podemos hablarlo si quieres, Si te apetece participar y aventurarte a experimentar con el dinero de esta manera, estaré encantada de conocerte y forjar un camino juntxs.